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Por aquí, tenemos algo por Buffy, la cazavampiros, el programa de televisión clásico de culto que estuvo al aire de 1997 a 2003. Está bien; antes de que desvíe la mirada y deje de leer, ténganos paciencia un momento. El tan aclamado programa de Joss Whedon no se trataba precisamente de una adolescente y su “Pandilla Scooby” de amigos luchando contra el monstruo de la película de la semana. Los monstruos, la magia, los vampiros eran las metáforas más relevantes de la vida.
No estamos sugiriendo que no había sólidas protagonistas femeninas en la televisión antes de 1997. Al igual que ellas, Buffy podía hacernos reír, pero también podía dar una paliza. Buffy era poderosa, valiente y completamente en control de su propio destino. Ella nos hizo creer que podíamos hacer cualquier cosa. Ser cualquier cosa.
Es exactamente en las formas en que Buffy crea una tribu ferozmente leal (y el motivo por el que la volvemos a ver una y otra vez) que usted puede aprender cómo matar la copia de su negocio y crear un programa de marketing de contenido que convierta a los contactos en una base de datos de ávidos fans.
Al igual que Buffy, su contenido debe seguir ciertas directrices:
1. Exija atención
Ahora mismo. Desde el principio. Su titular debe ser una sensación. No hay duda de que Buffy, la asesina de vampiros llama la atención. Es todo lo que se supone que debe ser un titular.
Claro y directo. La inteligencia y el juego de palabras confuso no tienen lugar aquí.
Corto y conciso. No más de 6 a 7 palabras.
Relevante. Debe hablarles directamente a sus lectores. Buffy habla con las personas que “la entienden”, los fans que comprenden que combina humor y horror, y que les cambia las ideas de una pequeña niña rubia indefensa en sus cabezas. Buffy no se acobarda ante el mal; ella lo mata.
Recuerde: no puede dar por sentado la atención de su lector. Tiene que ganársela, desde el título hasta la última palabra.
2. Hable como humano
Podemos pensar en decenas de programas para adolescentes que suenan melodramáticos, robóticos, generalmente incómodos. Los actores se oyen como si estuvieran leyendo un guion. ¡Porque simplemente la gente no habla así! Pero el diálogo de Buffy sonaba tan natural que los fanáticos se preguntaban si los escritores pasaban el tiempo con adolescentes. (Respuesta: No lo hacían.) Aquí hay una lección crítica que aprender. Incluso si presta servicios a otras empresas, debe deshacerse del discurso corporativo. Deseche la jerga técnica y los clichés aburridos. En lugar de que lo haga sonar bien informado y con autoridad, este tipo de lenguaje lo hace distante, seco e irrelevante.
Al igual que con su titular, debe ser convincente. Así que mantenga todos los días sus oraciones cortas, la estructura simple y las palabras. Y por favor, evite minuciosamente palabras como deliberadamente, utilizar, facilitar, sinergia, obtener y consumidores (son personas), y también frases (como usted amará nuestros productos). El discurso corporativo está tan profundamente arraigado en nosotros que puede ser un hábito difícil de romper. Pero debe trabajar en ello.
Buffy nos enseñó una cosa más sobre el lenguaje que es muy importante. El programa fue a menudo tan elogiado por la forma fresca e inventiva en que usaba el diálogo que los críticos acuñaron un término para ello: “La jerga de Buffy” Los personajes eran ingeniosos y perspicaces; convirtieron su forma de hablar en frases simpáticas.
Juegue con la forma en que enlaza las oraciones. Escriba con los cinco sentidos, con detalles deslumbrantes. Y adopte los verbos fuertes. Harán que su escritura brille, y le permitirá quitar adjetivos y adverbios innecesarios. Considere esta oración:
La casa está en llamas. Explota, estalla, se despliega, florece, se agita en llamas son más interesantes que está en llamas.
3. Haga reír a la gente
Buffy era muy divertida. Joss era infame por interrumpir un momento desgarrador y hacer una broma inexpresiva. Incluso la inscripción de la lápida de Buffy (más sobre eso adelante) terminó en una nota irónica. “Hermana amada. Amiga leal. Salvó al mundo. Muchas veces.” El programa era muy bueno, porque no solamente aludía al sentido del humor. Hizo que sintiéramos todas las sensaciones, aquí mismo en las entrañas. Eso se llama pathos. Inyecte su contenido con algo de eso y brillará. Hable directamente a los lectores sobre sus miedos, sueños, ambiciones, emociones, ansiedades y placeres; hágalos sentir, y ellos responderán con su más profunda lealtad.
4. Atrévase
No solo el asesino era intrépido, sino que el programa también lo era. Joss nunca tuvo miedo de correr riesgos enormes al contar historias. Buffy murió, dos veces, y volvió a la vida. Joss fue uno de los primeros en hacer un episodio musical exitoso de TV. Y la ganadora del Emmy, “Hush”, no tenía diálogos la mayor parte del tiempo.
Al igual que Joss, sea intrépido con su contenido. Experimente con la estructura (por ejemplo, textos largos, textos cortos, listas, anécdotas). Cuente una historia. Trate el tema desde un punto de vista inesperado. Por ejemplo, podría imaginar la venta de sus productos desde el punto de vista de los mismos objetos reales. ¿Suena ridículo? Probablemente. Pero también lo hace un adolescente que lucha contra las fuerzas de la oscuridad. Y nunca, nunca tenga miedo de ir al lugar oscuro. Puede pensar que todo lo que quieren sus clientes sea unicornios y arcoíris, pero lo que realmente quieren es un mundo que se parezca al suyo... y gran parte de la vida se vive en la oscuridad.
5. Salve al mundo
Bueno; no al mundo entero. Solo al mundo de sus clientes. Identifique sus problemas, obstáculos y temores. Y mate al gran malo. Y ¿adivine qué? Pronto usted será con el único que se reúnan, el líder de su Pandilla de Scooby. El elegido.