CENTRO DE SERVICIO
Quítese el velo negro y deshágase de las flores; no iremos al funeral del cheque de papel, ni de Lockbox, todavía. Propietarios de negocios, sáquenle brillo a sus llaves.
Sí, el cheque impreso ha experimentado un lento, y constante, declive, pero 27.8 miles de millones de cheques se giraron en 2009. Los cheques pagados en el mismo año representaron un valor de $31.6 billones y se adjudicaron el 22 % de todos los pagos no en dinero en efectivo que se hicieron (Estudio sobre pagos de la Reserva Federal 2010). Quizá lo más revelador: 52 % de los consumidores todavía paga por lo menos una factura con cheque, lo que lo hace el método más frecuente de pagos de facturas (Informe de investigación del FIS, julio de 2012).
El ritual de la emisión de cheques está firmemente arraigado en el supermercado, para ir de compras, salir a comer, entretenimiento y pago a contratistas y ayuda para el grupo familiar (FIS). La cuasi mítica “sociedad sin papel” que hemos estado incansablemente previendo desde el ascenso de la banca en línea y del pago de facturas en línea aún no ha llegado. Al menos en el futuro previsible, el cheque de papel está aquí para quedarse, y por ello, también, lo está Lockbox.
Flujo de caja constante, la conocida piedra en el zapato para todo propietario de negocio. La respuesta a sus infortunios es sencilla: Lockbox, un buzón corporativo que mantiene y opera su banco o un tercero proveedor del servicio. Pueden establecerse los servicios Lockbox en varias sucursales localizadas de manera conveniente para sus mayores fuentes de flujo de caja para agilizar el proceso de cobro.
Los clientes envían sus pagos por correo postal a la dirección de su Lockbox en donde personal del banco abre el correo y deposita los cheques en su cuenta. Usan tecnología de captura de imágenes para sacar copias electrónicas, del anverso y del reverso, de cupones, cheques, facturas y sobres, y le envían un informe diario. Estos datos también están disponibles para sus empleados por medio de un portal seguro en línea y pueden incluir imágenes, informes y transacciones excepcionales asociados con cada pago.
Los servicios Lockbox de la mayoría de los bancos pueden adaptarse a las necesidades de su organización y por lo general se dividen en tres categorías:
Debido a las tarifas de procesamiento asociadas, el servicio Lockbox no es rentable para todas las organizaciones. Usualmente funciona mejor para las empresas que procesan un gran volumen de pagos, como empresas de servicios públicos, empresas que administran propiedades, autoridades municipales, empresas de manufactura, empresas que facturan gastos médicos, etc. Sin embargo, debido a que una mayor automatización ha reducido significativamente el costo del procesamiento de pagos, los bancos pueden ser más flexibles, personalizando sus servicios para que se ajusten incluso a negocios más pequeños con menor volumen de pagos.
El servicio Lockbox es una herramienta de flujo de efectivo altamente eficaz y un sistema de administración de datos que puede mejorar su eficiencia y productividad, y a la larga, ahorrarle dinero. Para obtener más información sobre cómo puede funcionar este servicio para su negocio, comuníquese con su Representante de Administración de Dinero para hacer una evaluación de sus necesidades y opciones personalizadas de precios; Lockbox puede tener la clave para su éxito.